Los electrodomésticos son el gran gasto de electricidad en los hogares españoles con un 55% del consumo total aproximadamente, por eso conocer su consumo y modificar nuestros hábitos diarios nos puede ayudar a ahorrar en la factura a final de mes.

El gasto energético de un aparato eléctrico está ligado a diversos factores, como pueden ser su tamaño, el tiempo de uso o la eficiencia energética. También es necesario tener en cuenta las nuevas tarifas eléctricas, definidas por la discriminación horaria que pueden hacernos elevar nuestro consumo si no nos fijamos en el precio del KWh en cada tramo. 

Pero no te preocupes, porque en el artículo de hoy te contamos el top 5 de electrodomésticos que nos hacen derrochar más electricidad en nuestro hogar, y que han sido estipulados por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) y el Instituto por la Diversificación y el Ahorro de la Energía (IDAE).  

Cómo calcular su gasto energético

Lo primero que debemos saber es cómo se calcula el gasto de un electrodoméstico. La fórmula es muy sencilla, e incluso podemos sacarla nosotros mismos: 

Energía consumida = Potencia eléctrica x Tiempo de utilización

Si quieres hacer una auditoría más profesional del consumo de tu casa también es posible utilizar un vatímetro, es decir, un medidor de consumo eléctrico que calcula la potencia empleada en cada electrodoméstico de manera individual. Gracias a este aparato conoceremos los consumos de energía durante un determinado periodo de tiempo. 

Un truco extra: ten en cuenta el consumo de los electrodomésticos en stand by, y asegúrate de desconectarlos para ahorrar más energía. 

Frigorífico

El electrodoméstico imprescindible de cualquier hogar, que consume hasta el 30.6% de la energía total de todos los aparatos eléctricos, ya que se encuentra encendido las 24 horas del día.  

Para reducir su gasto es importante no dejar la puerta abierta, ya que incrementa notablemente el trabajo del motor, y no introducir alimentos calientes, que pueden producir un sobreesfuerzo para enfriarlos y por ende un mayor consumo. 

Si es posible, lo mejor es optar por frigoríficos más eficientes, de clase A+++, que consumen hasta un 80% menos que los de clases inferiores, lo que garantiza un gran ahorro a lo largo de su vida útil, y evita la emisión a la atmósfera de una tonelada y media de CO2. 

Lavadora

Con un 11.8% del gasto total que se llevan los electrodomésticos, la lavadora se sitúa en segundo lugar. 

Para lograr ahorrar en su consumo es tan sencillo como utilizar programas cortos y lavados en frío, además de asegurarse que su carga esté siempre al máximo, para evitar mayor gasto de energía en calentar el agua. 

Televisor

Según algunos estudios en España pasamos más de 4 horas de media frente al televisor, lo que provoca que consuma el 12% de la electricidad total consumida por electrodomésticos. 

Lo más importante a la hora de ahorrar en su utilización es no dejarlo en stand by: acordarnos de apagar completamente la televisión reducirá nuestra factura eléctrica. 

También podemos tener en cuenta que las pantallas con tecnología LED consumen un 25% menos que las LCD, y hasta un 40% menos que las pantallas de plasma. 

Horno

Los hornos son responsables de aproximadamente el 8.3% de la electricidad que gastamos en aparatos eléctricos. 

Algunos trucos para reducir su consumo son: no abrirlo mientras esté encendido, ya que desperdiciamos el 20% de su energía acumulada; asegurarnos de su limpieza, sobre todo por las grasas, que reducen su eficiencia; y sobre todo apagarlo antes de finalizar la cocción para aprovechar su calor residual. 

Ordenador

Seguro que no te lo esperabas, pero el ordenador es el quinto aparato que más consume en los hogares españoles, y supone el 7.7%

Si quieres limitar el consumo que produce en la factura eléctrica puedes bajar la iluminación de la pantalla, quitar el salvapantallas y apagar los periféricos, como impresora o escáner, y no dejarlo encendido si no lo estamos utilizando. 

Apuesta por la energía fotovoltaica

Ahora ya sabes a qué electrodomésticos tienes que prestar especial atención para reducir tus facturas eléctricas, pero si lo que realmente quieres es ahorrar más del 50% en electricidad, la mejor opción es apostar por un sistema de autoconsumo fotovoltaico

Gracias a la energía solar reducimos la dependencia energética de nuestro hogar, además de su huella de carbono, contribuyendo, no solo a nuestro bolsillo, sino también al medio ambiente. 

LRP Energy te ayuda en la transición energética, ofreciéndote un presupuesto personalizado y lo más ajustado posible a tu consumo. Contacta con nosotros e infórmate sobre los beneficios de la energía solar. 

Cada vez más hogares se han decidido por unirse a la energía fotovoltaica, pero aprovechar al máximo su producción y así rentabilizar lo antes posible su inversión es una de las principales preocupaciones de los propietarios. 

Para ello, debemos tener en cuenta que existen numerosos factores que afectarán al rendimiento de los módulos fotovoltaicos. ¡Te lo contamos todo en este artículo!

En qué consiste el rendimiento de un sistema fotovoltaico

El rendimiento es uno de los factores que influye en la producción de energía de nuestra instalación, y hace referencia a la capacidad de cada panel solar de transformar la energía del sol en energía eléctrica apta para nuestro consumo doméstico. Esto quiere decir que, cuanto mayor es el porcentaje de rendimiento, la energía producida también es mayor.

Por suerte en los últimos años, los modelos más novedosos de placas fotovoltaicas han aumentado su eficiencia hasta en un 20%, aunque debemos tener en cuenta que este porcentaje no es fijo y que encontraremos variaciones dependiendo de diversos factores, entre los que destacan:

  • Los materiales de la instalación de energía solar
  • La temperatura o el clima del lugar
  • La irradiación solar y la ubicación geográfica
  • La orientación e inclinación de los paneles
  • El mantenimiento
  • La estacionalidad
  • La existencia de sombras

Materiales del sistema fotovoltaico

No solo los materiales, sino la calidad de los mismos. El rendimiento de la instalación podría sufrir una reducción del 20% si no empleamos los componentes adecuados, por lo que es imprescindible escoger la máxima calidad de los materiales para alargar la vida útil de nuestra instalación. 

Elegir al fabricante más adecuado no es fácil, ya que requiere tiempo suficiente para investigar los pros y contras de cada modelo, por eso en LRP Energy te ofrecemos los materiales de más alta calidad, para que cada instalación ofrezca el máximo rendimiento. 

Temperatura y clima

La zona geográfica afecta a través de distintos aspectos al rendimiento de nuestro sistema fotovoltaico, entre ellos encontramos la temperatura y el clima. 

Respecto a la temperatura, aunque se ha generado el mito de que los paneles necesitan calor para producir más energía, la realidad es que esto no es correcto: los módulos solares necesitan radiación solar pero funcionan mejor a temperaturas medias, llegando a reducir su rendimiento si nos encontramos ante calor extremo. 

La temperatura óptima sería los 25ºC, y a medida que aumenta el calor percibido en la superficie de las placas la productividad desciende aproximadamente un 1% por cada 2ºC que suba el clima.

También queremos destacar que gracias a los avances tecnológicos ya encontramos paneles solares de alta calidad capaces de resistir perfectamente ante situaciones meteorológicas adversas, como granizo o nieve. 

Por otra parte tenemos el clima, factor que nos muestra la producción de energía que obtendrán nuestras placas solares en un año. Es cierto que la radiación solar directa tiene un efecto más positivo en la generación de energía, pero estas instalaciones también funcionan en días nublados, ya que los rayos de luz solar atraviesan las nubes y llegan a la superficie de los módulos fotovoltaicos. En climas nublados encontramos un rendimiento de entre un 10% y un 25%. 

Por suerte, la mayoría de fabricantes incluyen en su ficha técnica el Coeficiente de Temperatura de Potencia: dato que hace referencia a la pérdida de potencia generada por cada grado que aumenta por encima de la temperatura ideal, los 25ºC. Este Coeficiente varía según el tipo de panel y las prestaciones que posea.

Irradiación solar y ubicación geográfica

Otro factor relacionado con la ubicación geográfica en la que nos encontramos es la cantidad de radiación solar de esa zona. El número de horas de luz solar recibidas en un año en España repercute muy positivamente en la producción de los paneles, hablando de unas 2.000 a 3.000 horas anuales. 

Podemos diferenciar tres tipos de radiación: 

  • Radiación directa: proveniente directamente del sol, depende de las nubes que se produzcan y del momento del año en el que nos encontremos. 
  • Radiación difusa: llega desde la atmósfera y hace referencia al reflejo que produce sobre las nubes. Si no existe presencia de nubosidad, la radiación solar generada puede alcanzar hasta un 15% del total. 
  • Radiación reflejada: producida por la radiación rebotada o reflejada procedente de la superficie. Solamente reciben este tipo de radiación las viviendas ubicadas de forma perpendicular a la superficie terrestre. 

Teniendo en cuenta los diversos parámetros, cada zona geográfica recibe más o menos cantidad de radiación solar, lo que influye en el rendimiento de los paneles solares.

Orientación e inclinación

No todas las orientaciones producen la misma cantidad de energía, siendo la orientación sur la idónea para ubicaciones del hemisferio norte. ¿Por qué? Esto es debido a que al orientar los paneles al sur, los rayos perpendiculares que se reflejan en la superficie permiten un incremento de su productividad y, por tanto, aumentan también la rentabilidad del sistema fotovoltaico. 

Si hablamos de orientación este solo recibirán sol en las horas más cercanas a la mañana, y la orientación oeste se relaciona con mayor producción durante las últimas horas del día. Pero sin duda, la peor orientación en España sería la norte. 

Otro factor importante es la inclinación, que aunque en ocasiones obligará a crear una estructura soporte que generé mayor o menor inclinación para obtener una mejor producción. 

Mantenimiento

El deterioro de los módulos fotovoltaicos, debido a fenómenos meteorológicos como granizo o nieve, contaminación o suciedad, puede reducir su rendimiento en un 15%. Esto provoca que el mantenimiento sea otro de los factores claves para aumentar la eficiencia de la instalación.

Por suerte un buen mantenimiento no requiere grandes inversiones de tiempo y su coste es muy reducido, ya que su componente principal es el silicio, material resistente que permite que el panel mantenga sus estándares de calidad a pesar de los climas adversos que puedan sufrir. Aunque debemos tener en cuenta dos aspectos: la limpieza de los módulos una o dos veces al año, y el reemplazo de piezas que se encuentren en mal estado o presenten algún fallo. 

Estacionalidad

Es innegable que en verano las placas solares perciben mayor cantidad de luz solar, y por ende, su producción crece. Esto nos hace ver que la estacionalidad es otro factor importante para las instalaciones de autoconsumo solar, pero no se observan tantas diferencias en su rendimiento: aunque en invierno la producción de energía bajará, son porcentajes muy poco significativos. 

Sombras

Las sombras son un aspecto esencial e importante que afecta en gran medida al rendimiento de las placas solares, pudiendo reducir su producción hasta un 30%. 

Aunque en ocasiones sea difícil evitar al completo las sombras, sobre todo en hogares con poco espacio en la cubierta o en el tejado, lo mejor es llevar a cabo un estudio previo para evitarlas lo máximo posible. Y si la situación de nuestra vivienda no nos lo permite, lo más recomendable es utilizar tecnologías que permitan mantener el rendimiento de las placas, como los optimizadores. 

Tras examinar cada unos de los factores que pueden afectar a la eficacia y el rendimiento de nuestra instalación, es importante tenerlos en cuenta para sacar el máximo partido al sistema, produciendo la mayor energía posible y alargando su vida útil para disfrutar todo el tiempo posible de la energía del Sol. 

La energía solar nos proporciona en solo una hora tal cantidad de energía que podría satisfacer las necesidades energéticas de todo el mundo durante un año. Este potencial es el que provoca que la fotovoltaica se presente como una de las alternativas más limpias para un futuro sostenible. 

Además, expertos, gobiernos y organizaciones medioambientales ponen su foco en que la energía solar llegue a ser la principal fuente de suministro energético en la mayoría de países, favoreciendo su accesibilidad. Pero la realidad es que todas estas asociaciones están a favor de la fotovoltaica por los grandes beneficios que aporta a nuestro medio ambiente. 

¡Sigue leyendo para descubrirlos!

Primero, ¿qué es la energía solar fotovoltaica?

La fotovoltaica es una fuente de energía de origen renovable que obtenemos de la radiación de rayos solares, para su posterior transformación en electricidad. Esto es posible gracias a las instalaciones fotovoltaicas compuestas de módulos solares, inversor y, en ocasiones, baterías. Cada placa contiene unos pequeños dispositivos con propiedades semiconductoras, conocidos como células fotovoltaicas, formadas de silicio monocristalino, policristalino o amorfo. 

Estas celdas son las encargadas de generar la energía: cuando la luz solar incide sobre ellas, los fotones de los rayos ultravioleta son absorbidos y en su interior se liberan los electrones. Este movimiento de electrones produce electricidad en forma de corriente continua, que no se puede utilizar en los hogares, por eso necesitamos el inversor, encargado de convertir la corriente continua en alterna para su uso doméstico. 

Ahora ya estamos listos para conocer sus múltiples beneficios ecológicos

Es renovable e inagotable

El Sol nos proporciona anualmente una cantidad de energía que representaría unas 4.500 veces la energía que consumimos, por lo que representa una fuente de energía abundante y renovable.

Además, algunos estudios estiman que el sol aún estará con nosotros millones de años, convirtiendo a la energía solar en una fuente prácticamente ilimitada

Gracias a la tecnología fotovoltaica aprovechamos esta radiación solar para transformarla en electricidad, que podemos consumir en nuestros hogares o negocios. 

Reduce el cambio climático

La energía solar ayuda a disminuir las emisiones de CO2, evitando la emisión de gases contaminantes y nocivos para el ser humano y la vida en el planeta. 

La mayor parte de estos gases se producen directamente por la dependencia actual de los combustibles fósiles para generar energía, los cuales provocan grandes niveles de dióxido de carbono y contaminación, siendo uno de los principales responsables del cambio climático.

¿Sabías que la huella de carbono que la tecnología solar deja sobre el planeta es de 2.1 gramos? Esto es unas 14 veces menos que la de otras energías renovables. 

Evita la degradación ecológica

Como ya te hemos comentado antes, el impacto ambiental de la energía solar es mucho menor que el de otras fuentes renovables, ya que, por su capacidad de adaptación al entorno, por sus materiales y por su manera de producir energía, esta tecnología apenas genera impacto en las zonas donde se instala. 

Ayuda a conservar el agua

El agua es uno de nuestros recursos más preciados, y actualmente solo el 3% de la superficie terrestre es agua dulce. La extracción de recursos y las fuentes de electricidad convencionales son intensivas en mano de obra y perjudiciales para el medio ambiente, ya que requieren de decenas de miles de litros de agua cada año.

Lo que diferencia la fotovoltaica de otras fuentes de energía renovable es que no requiere agua para su uso, por lo que supone una gran solución de ahorro de agua a largo plazo

Disminuye los riesgos para la salud

Las conocidas emisiones de CO2 no solo contribuyen al cambio climático o al efecto invernadero, sino que también son nocivas para la vida en el planeta, ya que los gases se generan al quemar los combustibles fósiles y, su alta presencia ya se ha relacionado con diferentes problemas respiratorios y cardíacos. 

Gracias a la energía solar tenemos un aire más limpio, reduciendo los óxidos de nitrógeno, dióxido de azufre y otros materiales nocivos, que representan un riesgo para la vida y causan muchos problemas en la salud de las personas. 

Beneficia la biodiversidad

Numerosos estudios ya han demostrado cómo distintas especies de plantas o animales se integran en torno a los parques fotovoltaicos, sin que estos afecten en su correcto desarrollo y expansión. 

Aunque es importante matizar que las instalaciones no deben necesitar la eliminación o deforestación de terrenos bajo protección medioambiental, ya que en ese caso sí que serían un riesgo para los ecosistemas. 

Otros beneficios de la fotovoltaica

Como has visto la energía del sol es una de las fuentes de energía más respetuosa con nuestro medio ambiente, pero no es el factor en el que presenta beneficios. ¡Te contamos un poco más!

  • Beneficios económicos
      • Creación de puestos de trabajo, desde el paso de fabricación, instalación y mantenimiento
      • Diversificación del suministro de energía
      • Reducción de la dependencia de combustibles fósiles
      • Desarrollo económico
      • Estabilización de la economía al reducir incertidumbre respecto al precio futuro de la energía
  • Beneficios sociales
    • Independencia energética
    • Reducción en las facturas de la luz
    • Mejora de la salud de las personas
    • Oportunidades de empleo
    • Revalorización de las viviendas
    • Mejores perspectivas en los suministros de energía

Ya no nos quedan dudas de que la fotovoltaica es una fuente de energía abundante, con beneficios en multitud de aspectos y que nos ayudará a lograr una transición energética de la forma más sostenible posible. 

Apuesta por la fotovoltaica y únete a la energía del sol con LRP Energy. 

Quizá has pensado que con tu instalación de paneles solares ya tienes tu consumo energético cubierto, y en muchas ocasiones esto puede ser cierto, sin embargo existe un componente extra que puede aportar aún más beneficios. 

Este elemento del que hablamos son las baterías solares, o sistemas de almacenamiento, encargadas de almacenar el exceso de energía que el sistema fotovoltaico ha generado durante el día. Gracias a las baterías, podemos ser autosuficientes incluso por las noches, cuando las placas solares no generan energía, sin necesidad de recurrir a la red eléctrica. 

En este artículo te contamos todo lo que necesitas saber sobre los sistemas de almacenamiento fotovoltaico, desde su definición a los tipos que existen, pasando por los beneficios que nos aportan. 

¿Qué es una batería solar y cómo funciona?

Las baterías solares, o acumuladores de energía, son los elementos encargados de almacenar la energía excedentaria que producen los módulos fotovoltaicos (paneles solares), para que podamos utilizarla posteriormente, sobre todo durante las horas en las que no hay luz solar y la instalación no produce energía. 

Funcionamiento de una instalación fotovoltaica con baterías solares

Su funcionamiento es muy sencillo: en las horas de sol la instalación produce la energía necesaria sin ningún tipo de coste, y en el caso de producir más energía de la que vayamos a consumir se almacena en la batería solar hasta su carga máxima, mientras que el resto se vierte a la red de distribución eléctrica y genera una compensación en la factura mensual.

De esta forma, durante las horas nocturnas, cuando el sistema fotovoltaico no genera energía, consumimos la almacenada anteriormente en la batería sin ningún tipo de coste y si esta se agota podemos recurrir a la red eléctrica. 

Tipos de baterías solares

En la actualidad encontramos distintos modelos de baterías solares en el mercado, que se diferencian principalmente por la tecnología utilizada en su fabricación. Algunos tipos que podemos encontrar son: 

  • Baterías de plomo ácido abierto

Las más económicas, cuya aplicación más común la encontramos en el sector del automóvil como batería de tracción en vehículos eléctricos. Están consideradas una tecnología inferior ya que su vida útil es de aproximadamente 300 ciclos de carga, lo que se traduce en menos de un año de vida si se carga y descarga una vez al día. Se destinan sobre todo a pequeños consumos y se pueden descargar hasta un 60%.

  • Baterías AGM (Absorbent Glass Mat)

Permiten que las placas de plomo absorban más rápido y mejor el ácido. Como en el caso anterior, también cuentan con un ciclo de vida corto, aunque aumentan hasta los 500 ciclos de carga y descarga, es decir, entre 5 y 10 años. Son recomendables para furgonetas y autocaravanas, ya que pueden utilizarse como batería de arranque. Una de sus ventajas es que no necesitan mantenimiento. 

  • Baterías de GEL

Compuestas por electrolitos gelificados y que, al estar selladas, no desprenden gases nocivos. De esta manera pueden instalarse en lugares con poca ventilación, por lo que a diferencia de los modelos anteriores se pueden instalar en viviendas siempre y cuando su consumo sea bajo. Mientras, su ciclo de vida es bastante mayor con unos 1.200 ciclos de carga y descarga, y al estar selladas tampoco necesitan ningún tipo de mantenimiento. 

  • Baterías solares estacionarias

Aunque su desarrollo es más reciente ya cuentan con una tecnología superior, con 3.000 ciclos de carga pueden durar hasta 15 años y descargarse hasta el 80% de su capacidad. Al contener un regulador que alimenta el consumo y recargar la batería, esta se descarga muy pocas veces. Este modelo es el más recomendado para instalaciones fotovoltaicas. 

  • Baterías de litio

Las más potentes en la actualidad con hasta 6.000 ciclos de carga y una descarga casi al 100%. Se cargan más rápido y ofrecen una mayor densidad energética, por lo que normalmente se utilizan para viviendas o industrias con gran consumo de energía. Otra ventaja es que son más fáciles de transportar, sobre todo por su menor peso, y pueden instalarse en lugares sin ventilación ya que no emiten gases y no requieren ningún tipo de mantenimiento. 

Ventajas de contar con una batería solar

Algunas ventajas de incorporar sistema de almacenamiento a nuestra instalación fotovoltaica son:

  • Aumentar la rentabilidad de la instalación: ya que se reducirá el plazo de recuperación de la inversión al utilizar esa energía en nuestro consumo en vez de verterla a la red, incrementando el ahorro.
  • Mayor independencia de la red eléctrica: provocando también menor dependencia e inestabilidad ante las subidas de precio.
  • Minimiza la huella de carbono de los hogares, gracias a la reducción de emisiones de CO2.
  • Nos ofrece la posibilidad de aprovechar las ayudas y subvenciones, ahorrando hasta el 70% del coste inicial. 

Por tanto, si tu objetivo es alcanzar el mayor ahorro e independencia de la red eléctrica posible, las baterías solares son el aliado perfecto, permitiendo aprovechar al máximo la instalación solar fotovoltaica. 

No dudes más y pásate al autoconsumo solar de la mano de LRP Energy. 

Actualmente la aerotermia es uno de los sistemas de climatización más eficientes, si además la usamos de manera conjunta con una fuente de energía renovable como es la fotovoltaica, sus ventajas se multiplican. 

En el artículo de hoy queremos contarte si es rentable combinar una instalación de placas solares con la climatización por aerotermia.

Lo primero, ¿qué es la aerotermia?

La aerotermia es un sistema de climatización capaz de extraer la energía que contiene el aire para producir agua caliente sanitaria (ACS), calefacción y refrigeración en nuestros hogares o negocios. El principio de la aerotermia se basa en el intercambio de calor a partir de una bomba aerotérmica que aprovecha la energía del aire para volcarla en el interior del edificio, consumiendo muy poca electricidad para realizar este proceso.

¿Cómo es el proceso para generar calefacción y ACS?

Para entender el funcionamiento de la aerotermia es necesario conocer que la bomba de calor se compone por dos elementos principales: la unidad termodinámica, que se encuentra en el exterior de la vivienda, y el módulo hidráulico, en el interior, unidos por un circuito con fluido refrigerante. 

El proceso consta de dos fases principales:

  1. Primero, la unidad termodinámica se encarga de absorber la energía almacenada en forma de calor en el aire. 
  2. Y una vez absorbida la energía, esta es utilizada para calentar o enfriar el fluido refrigerante que recorre el circuito. Este líquido es el encargado de ceder el calor en el interior del inmueble a través de los sistemas de emisión, como suelo radiante o radiadores. Además, este fluido también se puede aplicar para generar agua caliente sanitaria (ACS).

Mientras, en los meses de verano se invierte ese ciclo, de tal forma que se absorbe el calor del interior de la vivienda y se expulsa al exterior. 

Y aunque es algo poco conocido, la aerotermia es considerada como una fuente de energía renovable, aunque necesita electricidad para llevar a cabo su funcionamiento. 

Aplicaciones de la aerotermia en nuestros hogares

Entonces, como ya hemos comentado, la aerotermia posee una triple función: calentar, enfriar y proporcionar agua caliente sanitaria. Algunas aplicaciones compatibles con los siguientes sistemas: 

  • Suelo radiante: la bomba de calor ayuda a calentar el agua hasta una temperatura de 50-55ºC, óptima para este sistema. A la vez, si lo utilizamos en los meses más calurosos, la temperatura del agua se reduce hasta los 15ºC, por lo que permite extraer el calor del interior y la vivienda se refresca. 
  • Radiadores: otro dispositivo que nos ofrece la posibilidad de ceder el agua calentada por la bomba de calor,combinando parte de la instalación anterior de calefacción con la tecnología del sistema de aerotermia. 
  • Aerotermia con fancoils o venticolectores: un sistema de climatización muy similar al aire acondicionado compuesto por una batería y un ventilador, y que al combinarse con la aerotermia, según la temperatura del agua, calentará o refrescará el ambiente con mayor rapidez. 

¿Y cómo funcionan la aerotermia y las placas solares?

Contar con un buen sistema de climatización por aerotermia nos ayuda a sacar más partido a nuestra instalación fotovoltaica, ampliando su rendimiento ya que ahora no solo interviene en nuestra iluminación el funcionamiento de electrodomésticos sino también en la producción de agua caliente sanitaria para nuestro hogar o negocio y en su climatización. 

También es interesante hablar de algunos sistemas de aerotermia más recientes y especialmente diseñados para obtener el mayor rendimiento en combinación con energía solar. Dichas bombas de calor incorporan un sistema de regulación que se integra con la instalación de placas solares para aprovechar los momentos en que las placas generan más electricidad de la que se está consumiendo para calentar agua con ese excedente y almacenarla para uso posterior. 

Algunos sistemas híbridos cuentan con un dispositivo de predicción meteorológica, de forma que pueden prever la cantidad de energía que producirán nuestros paneles y tomar decisiones inteligentes. 

Entonces, ¿es rentable combinar ambos sistemas?

Sin duda la respuesta es sí: esta combinación es una de las soluciones más eficientes en la actualidad, ya que nos ofrece la posibilidad de cubrir la demanda eléctrica de nuestro hogar o negocio con la energía generada gracias a los paneles solares. Entre algunos beneficios, destacamos que:

  • Por cada kWh eléctrico que consume la instalación fotovoltaica, el sistema de aerotermia es capaz de producir 4 kWh térmicos
  • El sistema de aerotermia cuenta con un consumo programable, de esta forma la instalación combinada se verá beneficiada con la posibilidad de coordinar los momentos de funcionamiento con las horas con mayor producción eléctrica. 
  • Si nuestra instalación genera excedentes energéticos, nos ofrece la posibilidad de aprovechar esos kilovatios con el sistema de aerotermia. Además, estas instalaciones suelen contar con acumuladores que permiten hacer uso de la energía con posterioridad. 
  • Tras la aprobación del Real Decreto 244/2019, los excedentes también pueden volcarse a la red eléctrica y recibir una compensación en la factura mensual por ellos, o vender la energía sobrante en régimen de venta. 
  • Por último, la energía producida por nuestros paneles solares es 100% renovable, minimizando así nuestro consumo de fuentes de energía fósiles y contaminantes, al mismo tiempo que reducimos notablemente nuestra factura eléctrica. 

Y si quieres conocer la rentabilidad de una instalación fotovoltaica en tu hogar, y obtener un presupuesto personalizado, no dudes en pedir ya tu estudio gratuito con nuestros asesores energéticos. 

LRP Energy se encarga de todo el proceso para ofrecer la mayor tranquilidad a nuestros clientes. 

Tras el Plan Moves II, el Gobierno Español ya ha actualizado la tercera edición del programa de ayudas para la compra de vehículos eléctricos y la instalación de sus puntos de recarga: el conocido como Plan Moves III, que tendrá continuidad hasta el final de 2023.

El presupuesto de este plan de ayudas es de 400 millones de euros, con opción de ampliar hasta los 800 millones dependiendo de la demanda, en ayudas directas para la movilidad eléctrica y para la infraestructura de recarga. 

Se trata de subvenciones para la compra de vehículos eléctricos, ya sea coches, motos o furgonetas, y coches híbridos enchufables. Estas ayudas pueden aumentar hasta los 7.000 por cada vehículo eléctrico, elevando la cuantía que ofrecía el Plan Moves II.

¿Quién puede beneficiarse del Plan Moves III?

Los beneficiarios de este plan de ayudas son tanto particulares como empresas que quieran comprar un vehículo eléctrico puro, un vehículo híbrido enchufable o un vehículo eléctrico de autonomía extendida. Pero el requisito es que el precio de este vehículo eléctrico no podrá superar los 45.000€. 

Por otra parte, respecto a la instalación de puntos de recarga, se pueden beneficiar autónomos, particulares, comunidades de propietarios, administraciones públicas y empresas

Diferencias entre el Plan Moves II y el Plan Moves III?

Entre estos dos planes de ayudas encontramos algunas diferencias y similitudes, aunque es importante resaltar que el Plan Moves II aún sigue en vigor, por lo que a la hora de presentar la solicitud para obtener la ayuda debes tener claro que solicitar ambos planes es incompatible aunque ambos proyectos co-existen durante un tiempo. 

La AUVE (Asociación de Usuarios de Vehículos Eléctricos) recomienda acogerse al Plan Moves III.

La principal diferencia entre ambos es que el Plan Moves III mantiene la línea de ayudas a la instalación de los puntos de carga, pero con un presupuesto mucho mayor, cubriendo hasta el 80% del importe. Además, este proyecto pierde las dos partidas sobre el fomento de bicis eléctricas de alquiler y los planes de movilidad de las empresas.

Beneficios del Plan Moves III

  • COMPRA DE VEHÍCULOS ELÉCTRICOS

Las ayudas para la adquisición de vehículos eléctricos dependen del tipo de modelo y de sí, a la hora de comprar un nuevo vehículo eléctrico, optas por achatarrar tu vehículo antiguo de combustión. 

Las subvenciones existentes para la compra de vehículos eléctricos con el Plan Moves III son: 

  • Coches eléctricos y de hidrógeno: 7.000€ con achatarramiento y 4.000€ sin achatarramiento.
  • Coches enchufables con una autonomía de entre 30 y 90 km: 5.000€ con achatarramiento y 2.500€ sin achatarramiento. 
  • Furgonetas eléctricas: 9.000€ con achatarramiento y 7.000€ sin achatarramiento. 
  • Motocicletas de zero emisiones: 1.300€.

Además, los autónomos que utilicen el vehículo eléctrico como herramienta de trabajo, como es el caso de taxistas y servicios de VTC, obtendrán un 10% más de ayuda. De igual forma ocurre con los compradores de movilidad reducida y los residentes en municipios con menos de 5.000 habitantes. 

Pero un requisito importante es que para beneficiarse de estas ayudas, el precio del vehículo eléctrico no podrá superar los 45.000€ sin I.V.A.

  • INSTALACIÓN DE PUNTOS DE RECARGA PARA VEHÍCULOS ELÉCTRICOS

Estos son los grandes beneficiados del nuevo Plan Moves III, y ha significado un gran impulso para la instalación de puntos de recarga, ya que se cubrirá en un 80% y no en un 40% como en planes anteriores. 

En la instalación de puntos de recarga, el % de la ayuda depende del tipo de beneficiario y del número de habitantes del municipio o ciudad en la que se lleva a cabo el proyecto, y se subvenciona un porcentaje del total de la instalación del punto de recarga. 

Para autónomos, particulares, comunidades de propietarios y administraciones públicas: 

  • En municipios de más de 5.000 habitantes: subvención del 70% respecto al total. 
  • En municipios de menos de 5.000 habitantes: subvención del 80% respecto al total. 

En empresas, puntos de recarga de acceso público y potencia de menos de 50 kW, definida como instalación de carga rápida:

  • En municipios de más de 5.000 habitantes: 35% grandes empresas, 45% medianas empresas, 55% pequeñas empresas. 
  • En municipios de menos 5.000 habitantes: 40% grandes empresas, 50% medianas empresas y 60% pequeñas empresas. 

Y para empresas con puntos de recarga de acceso público y potencia de más de 50 kW. 

  • En municipios de más de 5.000 habitantes: subvención del 30% respecto al total.
  • En municipios de menos de 5.000 habitantes: subvención del 40% respecto al total. 

Gracias a este Plan Moves III se espera que la matriculación de vehículos eléctricos en nuestro país crezca un 75%, lo que representaría un aumento de 70.000 unidades vendidas, según datos de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones.

Por eso, el objetivo del plan es reactivar el sector para que a finales de 2023 se hayan instalado 100.000 puntos de recarga y se encuentren en circulación 250.000 vehículos eléctricos nuevos. 

¿Y cómo podemos solicitar la subvención?

Estas ayudas se deben gestionar a través del concesionario, donde él aportará directamente 1.000€ de ayuda, descontándolos de la factura. Mientras, la subvención de la Comunidad Autónoma llegará en los 12 meses siguientes. 

Además, estás ayudas son obligatorias de declarar a la Hacienda.

Ya llega el frío, y al igual que comenzamos a cambiar la ropa para afrontar el frío, tenemos que conocer cómo proceder en el mantenimiento de nuestra instalación fotovoltaica. Además, seguro que hay dudas sobre si seguirá generando electricidad durante los meses más duros del año. 

Pues te lo resolvemos todo en este artículo, ¡no te lo pierdas!

¿Funciona una instalación fotovoltaica en invierno?

La respuesta es rotundamente sí. Aunque en invierno es necesario que los paneles tengan una exposición más prolongada para generar una cantidad de electricidad similar a la que pueden proveernos en el verano, sí que seguirán produciendo electricidad llueva, truene o en medio de una nevada. El único inconveniente sería si en caso de nevada fuerte, quedan totalmente cubiertas por el manto blanco. 

Pero sí podemos, y debemos, tener en cuenta una serie de factores para llevar a cabo ciertas operaciones de mantenimiento, y así garantizar que esta pérdida de rendimiento sea la menor posible. 

Uno de ellos es desplazar nuestros consumos a las horas centrales de sol, lo que nos permitirá contar con un mayor porcentaje de autoconsumo, en el caso de las instalaciones conectadas a la red; o que las baterías lleguen con más cantidad de energía a los momentos más desfavorables, cuando no disponemos de generación, si hablamos de instalaciones aisladas.

Otro factor importante a tener en cuenta es conocer los dispositivos más delicados, y que necesitarán un mayor mantenimiento. 

Componentes más sensibles de una instalación

  • Placas fotovoltaicas o paneles solares

Son el elemento más expuesto a las inclemencias climáticas, ya que se sitúan normalmente sobre la cubierta de la vivienda y siempre al aire libre. 

Aunque su diseño y fabricación tiene en cuenta estos detalles, es mejor si llevamos a cabo ciertos cuidados como mantener limpia su superficie. Un poco más adelante te contaremos cómo mantener tus placas perfectamente limpias 😉

Otro problema puntual que puede darse en los paneles en invierno es la presencia de sombras, que puede dar lugar a pérdidas de rendimiento, ya sea por las hojas que caen de los árboles o por los propios obstáculos del entorno que, con una trayectoria del sol en el horizonte más baja, provocan sombras durante más tiempo. 

Si te encuentras en una región en la que nieva frecuentemente, o en invierno las horas de sombra aumentan demasiado, una muy buena idea sería optar por instalar optimizadores en cada placa.

  • Baterías

Uno de los elementos más sensibles, y cuya temperatura idónea suele ser de 20-25ºC.

Aunque por regla general reaccionan peor al calor, también es importante tener cuidado con el electrolito cuando bajan las temperaturas, y para ello lo ideal es medir periódicamente el voltaje y la densidad, sustituyendo si hubiese algún vaso dañado. 

Pero el aspecto, muy sencillo, que nos ayuda de manera notable es ubicar los acumuladores a cubierto, donde no se congele el electrolito para que sigan siendo funcionales en los meses más duros del año. 

Y si vivimos en zonas donde este riesgo sea muy alto, otra opción es optar por baterías de gel, que no se congelan o directamente dar el salto a las baterías de litio, cuyas ventajas son cada vez mayores y su precio más contenido. Además, soportan mejor las bajas temperaturas. 

Entonces, ¿cómo tengo que realizar su mantenimiento?

Las pérdidas ocasionadas por la ausencia de limpieza de los módulos puede llegar hasta un 8% en lugares con mucho polvo en el ambiente, como cerca de industrias o zonas transitadas por vehículos. Pero podemos reducir estas pérdidas gracias a una buena limpieza con frecuencia. 

Para mantener limpios los paneles solares basta con utilizar agua con una pequeña cantidad de jabón para que posteriormente el aclarado sea más sencillo, pero cuidado y no uses detergentes o materiales de limpieza ásperos, ya que pueden dañar la superficie de la placa de forma permanente.

La mejor manera de limpiar el panel es utilizando una esponja suave y una pequeña cantidad de lavavajillas, mojando previamente la suciedad para que después sea más fácil retirarla. Por último sólo sería necesario aclarar el panel con agua abundante sin dejar restos de jabón.

Por norma general se recomienda realizar esta limpieza unas 3 o 4 veces al año, o con mayor frecuencia si se trata de una zona con mucho nivel de polvo y suciedad, y durante el invierno asegúrate de que no se han quedado copos de nieve que nos hagan perder eficacia. 

Otro punto importante es revisar los distintos elementos de la instalación, desde el inversor a la estructura soporte, para verificar que todos los componentes funcionen con normalidad. 

Desde LRP Energy buscamos siempre velar por la seguridad de nuestros clientes, por lo que recomendamos que si los paneles se encuentran en un lugar de difícil acceso llamen a un especialista que realice de manera segura la limpieza. 

Y si tienes alguna duda no dudes en ponerte en contacto con nosotros para que podamos resolverlas.

Aunque en la mente colectiva lo primero que se nos viene a la cabeza son las placas solares, una instalación fotovoltaica tiene más que este componente, como son los inversores solares, las baterías o el sistema de monitorización; y otros que podríamos definir como más sencillos como los soportes, optimizadores, el contador bidireccional y demás pequeños componentes entre los que entran el cableado, los sistemas de protección y fijación, etc.

Por eso es importante hacer una buena elección de todos los elementos en cuanto a calidad, rendimiento, garantía o precio; y en este artículo te vamos a contar en qué consiste cada una de estas piezas del sistema fotovoltaico y cuál es su función en la instalación. 

Paneles solares

También llamados módulos o placas fotovoltaicas, son uno de los componentes imprescindibles, encargados de generar energía eléctrica a partir de la luz incidente sobre los mismos gracias al denominado efecto fotovoltaico. 

La potencia de un panel solar no es el único factor que debemos tener en cuenta a la hora de realizar la instalación, también es importante considerar su eficiencia y garantía de rendimiento a largo plazo. Por esto puede darse el caso en el que un módulo de menor potencia ofrezca mejores prestaciones que uno mayor si estos dos parámetros son superiores, ya que consigue generar más energía en menos superficie y su producción se verá menos afectada por el paso de los años. 

Otros factores externos que pueden afectar al módulo fotovoltaico y su generación de energía, son la radiación solar, que dependería de nuestra situación geográfica, la orientación e inclinación de la cubierta y las posibles sombras proyectadas por elementos del mismo u otros inmuebles.

Actualmente existen tres tipos principales de paneles solares, que vienen definidos por la fabricación de las células que los componen y que son: de silicio cristalino (monocristalinos y policristalinos) y amorfos.

Desde LRP Energy siempre nos encargamos de ofrecer a cada uno de nuestros clientes la mejor calidad y eficiencia, es por eso que solo trabajamos con los mejores paneles monocristalinos. 

Inversor solar

El conocido como corazón de la instalación fotovoltaica; es el encargado de adaptar la corriente continua que se genera en los paneles solares, o que se almacena en la batería, dependiendo de la configuración del sistema, a corriente alterna, la que usan los equipos eléctricos de nuestra vivienda o negocio. 

Los inversores también se ocupan de almacenar información sobre la producción fotovoltaica, consumo de red y el estado general de la instalación, siendo los responsables de que podamos después monitorear toda esta información. 

Es por tanto, un elemento de alta eficiencia y seguridad, clave en las instalaciones fotovoltaicas conectadas a la red y en aquellas autónomas cuya misión es proveer de electricidad a una vivienda. 

En el mercado encontramos dos tipos de inversores solares y varias maneras de instalación de los mismos, desde microinversores a inversores en cadena o módulos inteligentes que unifican inversor y optimizadores. La elección de uno u otro puede depender de las características de la cubierta o el tipo de consumo que vamos a realizar, por lo que es importante contar con profesionales cualificados y de confianza que puedan asesorarte. 

Como los Asesores Energéticos de LRP Energy, que realizan un estudio gratuito en el lugar de instalación para que cada proyecto sea personalizado a cada cliente.  

Optimizadores

Componentes situados entre el conjunto de módulos fotovoltaicos y el inversor, cuyo objetivo es mejorar el rendimiento de la instalación haciendo operar cada módulo en su punto de máxima potencia. 

Y es que cuando un panel de una rama o string de módulos, es decir, el conjunto de paneles conectados en serie, tiene un rendimiento inferior a los demás, ya sea debido a defectos de fábrica, sombras u otras circunstancias, el resto de módulos operarán a la misma potencia que dicho panel, minimizando notablemente el rendimiento global de la instalación. 

Para evitar este problema una de las maneras más sencillas es gracias a la instalación de estos optimizadores, a los cuales se conecta cada panel, logrando que cada uno opere de manera independiente al resto. 

Otra forma de vadear este inconveniente es mediante la utilización de microinversores, que generan una inversión inicial más cara pero a su vez más flexible, permitiendo ampliar sin limitaciones el número de paneles de la instalación.

Estructura soporte

La encargada de fijar los paneles al terreno o tejado, encontramos dos tipos:

  • Estructura coplanar: utilizados cuando se quiere colocar el panel pegado a la cubierta, siendo la solución más atractiva desde el punto de vista estético, también permiten aprovechar mejor el espacio disponible en la cubierta. 
  • Estructura triangular: corrigen la inclinación y orientación del panel optimizando la producción eléctrica, y su uso es imprescindible si hablamos de cubiertas planas, se pueden fijar mediante tornillería o lastres. Su precio es algo superior al de las estructuras coplanares y ocupan más espacio ya que obligan a dejar espacio entre filas de placas para evitar que se den sombra entre ellos. 

Baterías y Sistemas de almacenamiento

Nos permiten almacenar la producción fotovoltaica para su posterior uso, aunque es necesario destacar que actualmente su utilización encarece bastante la instalación y retrasa el periodo de amortización de la inversión. Pero nos aporta grandes ventajas, como permitir la continuidad del suministro eléctrico en todo momento y una mayor libertad, ya que no dependemos constantemente de la red eléctrica y podremos aprovechar al máximo la producción fotovoltaica de nuestra instalación.

También encontramos instalaciones fotovoltaicas que cuentan con baterías para mejorar la eficiencia de su instalación o porque el consumo energético es principalmente nocturno; además si somos usuarios de vehículos eléctricos presenta aún más ventajas a la hora de cargarlo. 

Componentes secundarios

  • Contador bidireccional

Dispositivo que contabiliza la energía que fluye de la red eléctrica al consumidor (como cualquier otro contador), además también contabiliza la energía el consumidor inyecta en la red eléctrica. Es un elemento esencial en cualquier instalación de autoconsumo con excedentes, ya que la comercializadora nos compensará por los excedentes energéticos,es decir, por la energía producida y no consumida que vertemos a la red. 

  • Regulador de carga

Elemento de suma importancia ya que se encarga de que la instalación con baterías funcione correctamente. Este componente también se encarga de prevenir las situaciones de carga y sobre descarga de las baterías, alargando la vida útil de las mismas y asegurar que haya bastante suministro de energía en la batería para evitar que se descarguen. 

Existen dos tipos de reguladores: MPPT y PWM, y la elección de uno a otro dependerá de cómo sea la instalación fotovoltaica en cuestión o el uso que hagamos de la misma. 

  • Sistemas de monitorización

Aplicación que permite al cliente y usuario de la instalación verificar su adecuado funcionamiento a tiempo real de forma remota y optimizar nuestra instalación de autoconsumo, Su objetivo principal es que el usuario actúe con rapidez si se detectan fallos y/o averías en el sistema y por lo tanto, fuera necesario llevar a cabo una reparación del mismo. 

Desde LRP Energy nos encargamos de que tu instalación cuente con los componentes de mejor calidad y más adaptados a cada situación específica. 

Pide ya tu estudio gratuito para que compruebes por ti mismo la viabilidad del proyecto en tu propio domicilio o negocio, y únete a la energía fotovoltaica de la mano de una de las empresas líderes en el sector de la energía solar. 

El calentamiento global es cada vez un problema más acuciante, y esto nos hace comprender que el modelo de vida actual, y principalmente nuestra producción y consumo energético no es sostenible. 

En un contexto actual de incertidumbre ante la escasez de combustibles fósiles, con un aumento exponencial de la temperatura media del planeta y con unos límites de emisión de carbono cada vez más estrictos, las tecnologías de las energías renovables surgen cada vez más como la alternativa necesaria para afrontar un cambio en el consumo energético. 

Así mismo, la energía solar fotovoltaica se presenta como una de las formas de generación de electricidad más limpias, ya que no produce ningún tipo de emisiones mientras se genera y diversos estudios han demostrado que la huella de carbono durante su ciclo de vida es inferior a la de los combustibles fósiles. 

Pero, ¿qué es la energía solar fotovoltaica?

Aunque ya es por todos conocida, es importante saber en qué consiste la energía solar fotovoltaica para llegar a comprender el impacto positivo que tiene en nuestro planeta y el medio ambiente. 

Según el Instituto para la Diversificación y Ahorro de Energía (IDAE) la energía solar fotovoltaica aprovecha la radiación solar transformándola directamente en energía eléctrica gracias al efecto fotovoltaico, consistente en la emisión de electrones por un material cuando se le ilumina con radiación electromagnética (en este caso radiación solar).

Las instalaciones solares fotovoltaicas pueden ser básicamente de dos tipos: aisladas, y orientadas fundamentalmente a aplicaciones de bombeo, señalización, comunicaciones y electrificación rural; e instalaciones conectadas a la red eléctrica, orientadas al autoconsumo y a la venta de la energía eléctrica producida. 

Beneficios ecológicos de los paneles solares

Las instalaciones fotovoltaicas poseen múltiples beneficios asociados pero el más importante, y sin duda el que más nos incumbe en este artículo, es la reducción de consumo proveniente de la red. Los paneles generan su propia electricidad, por lo que el consumo de la red eléctrica será menor, y esto deriva en una reducción de las emisiones asociadas a la generación de electricidad. 

En el mix español de 2018 fueron de 246 gCO2/kWh de media, lo que significa que por cada kW producido mediante generación renovable, evitamos la emisión de 246g de CO2 a la atmósfera. 

Otro beneficio importante de implementar esta tecnología es la reducción de enfermedades relacionadas con la contaminación como puede ser la neumonía, bronquitis, asma o ataques al corazón. Dicha reducción de emisiones repercutirá directamente en la salud de los ciudadanos y el dinero destinado a sanar estas enfermedades podría aprovecharse en otras partidas. 

También impide que los ecosistemas sean devastados por refinerías o empresas que dependan de la creación de combustibles fósiles, y favorecen el cese de daños medioambientales, como la tala de árboles o la contaminación de aguas. 

Situación actual en España

Nuestro país se encuentra dando firmes pasos en su proceso de transición energética, y una gran prueba de ello son los datos que se desprenden del año pasado, 2021, momento en el que las energías renovables mejoraron sus marcas, especialmente la solar fotovoltaica. De esta manera, a lo largo del año pasado la potencia instalada de esta tecnología se incrementó un 28,8%, incorporando más de 3.300 MW al parque de generación nacional. 

Este impulso permitió que su producción eléctrica experimentase un aumento cercano al 37% tal y como recoge el Avance del Informe del Sistema Eléctrico Español 2021, documento que se publica anualmente con las principales magnitudes del sector en España.

En dicho año 2021, las tecnologías renovables continuaron su crecimiento en el parque generador del país, y es que, a cierre de año, representaban el 56,6% de la capacidad de producción nacional con 112.846 MW. En total nuestro sistema eléctrico nacional ha sumado este año pasado más de 4.000 nuevos MW renovables.

Y es que, ya es conocido que la energía solar es una opción obvia para un futuro con bajas emisiones de carbono y con energía fiable y duradera; además no sólo contribuiría a mitigar el cambio climático, sino que permite estimular las economías, crear puestos de trabajo y mejorar la integridad y seguridad de la red. 

Es por esto que los gobiernos, sobre todo la Unión Europea y en consecuencia el gobierno de nuestro país, ya se están movilizando para fomentar la implementación de esta producción de energía limpia.

Prueba de ello son las nuevas normativas regulatorias, que ya te explicamos en detalle en artículos anteriores, que buscan favorecer esta tecnología reduciendo los impedimentos que encontrábamos en el pasado y que han lastrado su crecimiento. 

También sabemos ya que Europa ve en las instalaciones fotovoltaicas la mejor alternativa de presente y de futuro, pretendiendo duplicar la capacidad fotovoltaica para 2050 y la instalación de 600 GW para 2030. De esta manera, se quiere promover la instalación de paneles solares tanto en viviendas residenciales como en edificios comerciales. 

Además, cada vez encontramos más empresas que apuestan por la energía solar fotovoltaica para reducir el coste de su factura eléctrica, reforzando al mismo tiempo su compromiso medioambiental corporativo y les aporta un valor diferencial y mayor competitividad con respecto a las empresas que no disponen de este tipo de instalaciones. 

Si tú también quieres ayudar al medioambiente y beneficiarte de todas las ventajas que ofrecen las instalaciones fotovoltaicas, contacta ya con LRP Energy para que nuestros Asesores Energéticos te realicen un estudio totalmente gratuito y personalizado.

Según un informe del Banco Mundial, solo en países pertenecientes a la OCDE, donde la sociedad de consumo juega un papel clave, se generan 572 millones de toneladas de basura al año: esto es el 44% de la generación global.

Mientras en nuestro país, cada español produce una media de 460 kg de residuos urbanos anualmente, es decir, seis veces más que su peso medio.

Pero estas cifras palidecen si las comparamos con el resto del planeta, ya que en el mundo se contabilizan más de 3,5 millones de toneladas de desechos, cifra que al año se eleva hasta los 1.300 millones de toneladas.

Este impactante dato es debido al modelo económico lineal que ha imperado durante años en nuestra sociedad, basado en la extracción, producción, consumo y eliminación. Modelo que implica altos costes ambientales, tanto a la hora de producción de los productos como al finalizar su ciclo de vida.

Por eso, las instituciones comunitarias trabajan en la reforma del marco legislativo para promover un cambio en el modelo de gestión de residuos actual, promoviendo una verdadera “economía circular”.

Pero, ¿qué significa este concepto? Te lo contamos todo en el artículo de hoy.

Concepto de economía circular

Se define como un sistema económico y social que tiene como finalidad la producción de bienes y servicios al mismo tiempo que reduce su consumo y el desperdicio de materias primas, agua y fuentes de energía.

La economía circular se centra en los procesos de producción y plantea reutilizar, reparar o reciclar aumentando la fabricación y el consumo sostenible. Así, además de reducir los residuos, se ahorra energía y se contribuye a evitar los daños irreversibles causados en lo relativo al clima, la biodiversidad y a la contaminación del aire, el suelo y el agua, como consecuencia de la utilización de recursos a un ritmo que supera la capacidad de la Tierra para renovarlos.

Para mitigar al máximo estás consecuencias medioambientales es necesario minimizar la generación de residuos y favorecer que los productos, los materiales y los recursos se mantengan en la economía durante el mayor tiempo posible: estas son las bases de la conocida como economía circular, que busca promover un nuevo modelo de producción y consumo de bienes y servicios ligado a la sostenibilidad.

Y es que, la sociedad en su conjunto debe contribuir a hacer de la economía circular una realidad ampliamente extendida. Un ejemplo nos lo ofrece la Organización de las Naciones Unidas, que a través de los Objetivos de Desarrollo Sostenible lucha por una producción y un consumo responsables (con el Objetivo 12). Estos 17 objetivos son ambiciosos y universales, y suponen una llamada a la acción para abordar los principales desafíos medioambientales, sociales y económicos a los que nos enfrentamos.

Por tanto, el objetivo principal de la economía circular es aprovechar al máximo los recursos materiales de los que disponemos alargando el ciclo de vida de los productos: esta idea surge de imitar a la naturaleza, donde todo tiene valor y todo se aprovecha, donde los residuos se convierten en un nuevo recurso. Así, logramos mantener el equilibrio entre progreso y sostenibilidad. 

Diferencias entre economía circular y lineal

Durante toda la historia moderna hemos aplicado modelos de producción lineales, es decir, se extrae, produce, consume y desecha, en ese orden. Pero la sociedad en la que vivimos hace que el ritmo de consumo se esté acelerando, ya que este es un modelo rápido pero poco sostenible para el planeta.

Mientras, la economía circular establece un modelo de producción y consumo más sostenible, donde las materias primas se mantendrían más tiempo en los ciclos productivos  y pueden ser aprovechadas de manera recurrente, procurando así generar muchos menos residuos.

Como su propio nombre indica, la esencia de este modelo radica en que los recursos se conserven en la economía el mayor tiempo posible, promoviendo que los residuos que generamos puedan servirnos de materia prima en otras industrias.

Principios de la economía circular

Ya es de conocimiento popular la regla de las 3R, esenciales para el desarrollo sostenible y la conservación del equilibrio ambiental: reducir, reutilizar y reciclar. Esto quiere decir que lo que obtenemos de la naturaleza debe volver a ella al agotar su vida útil, de una forma cíclica y respetuosa con el entorno. Pero, ahora también existen otras cuatro reglas menos conocidas, las 7R, los pasos necesarios para alcanzar la economía circular:

  • Rediseñar: pensar y diseñar los productos de manera que su proceso de fabricación consuma menos materias primas, alargue su vida útil y produzca menos residuos, o al menos sean residuos más fáciles de reciclar. Así incrementamos el cuidado del medio ambiente. 
  • Reducir: cambiar nuestros hábitos de consumo hacia un modelo más sostenible. Si minimizamos el consumo, evitamos la generación de residuos, el gasto de materias primas y, también, se reduce el impacto en el medio ambiente. 
  • Reutilizar: usando de nuevo o dando otra aplicación a los productos alargamos su vida útil. 
  • Reparar: arreglar y actualizar objetos antiguos para que se puedan volver a utilizar como vintage. 
  • Reciclar: promover mejores prácticas en la gestión de residuos y reutilizar aquellos que sea posible como materia primera para la fabricación de nuevos productos. 
  • Recuperar: fomentar nuevos usos a productos que van a ser desechados. 

Beneficios de la economía circular

  • Protege al medio ambiente: reduce las emisiones contaminantes, minimiza el consumo de recursos naturales y disminuye la generación de residuos. 
  • Beneficia la economía local: ya que fomenta modelos de producción basados en la reutilización de residuos cercanos como materia prima.
  • Fomenta el empleo: estimula el desarrollo de un nuevo modelo industrial más innovador y competitivo, así como mayor crecimiento económico y más empleo. 
  • Favorece la independencia de recursos: la reutilización de los recursos locales puede favorecer una menor dependencia de la importación de materias primas. 

Pero, ¿qué está haciendo la UE para implantar una economía circular?

El pasado año 2020, la Comisión Europea presentó el Plan de Acción para la Economía Circular, cuyo objetivo es conseguir productos más sostenibles, reducir los residuos y empoderar a los ciudadanos. También presta especial atención a los sectores intensivos en recursos, como la electrónica y las TIC, los plásticos, los textiles o la construcción. 

Un año más tarde, en febrero de 2021, el Parlamento votó el plan de acción sobre economía circular y demandó medidas adicionales para avanzar hacia una economía neutra en carbono, sostenible, libre de tóxicos y completamente circular en 2050. Para ello es necesario incluir leyes más estrictas sobre reciclaje y objetivos vinculantes para 2030 de reducción de la huella ecológica por el uso y consumo de materiales. 

Por último, en marzo de este año 2022, la Comisión dió a conocer el primer paquete de medidas para acelerar la transición hacia una economía circular, como parte del plan de acción sostenibles, el empoderamiento de los consumidores para la transición verde, la revisión de la normativa sobre productos de la construcción y una estrategia sobre textiles sostenibles. 

Pero ahora queremos saber tu opinión, ¿qué te parece este modelo económico? ¿Crees que acabará implantándose en nuestro país?

Navegación de entradas